El león cobarde – Cuento Infantil sobre Valores
En la sabana africana, donde el sol brilla con intensidad y la vida vibra en cada rincón, vivía un león llamado Leo. Leo era un león grande y fuerte, con una melena tan espesa como la noche. Sin embargo, a pesar de su imponente apariencia, Leo tenía un secreto: era un león cobarde.
Leo temía a todo: al rugido del trueno, al aullido del viento, a la sombra de una simple rama. Incluso los animales más pequeños, como las ardillas y los conejos, lo intimidaban. La cobardía de Leo era motivo de burlas para todos los demás animales de la sabana. Lo llamaban «el león miedoso» y se reían de él a sus espaldas.
Un día, mientras Leo se escondía detrás de una roca, avergonzado por su miedo, se encontró con una tortuga sabia llamada. La tortuga, al ver la tristeza en los ojos de Leo, le preguntó: «¿Por qué estás tan triste, joven león?».
Leo, con la voz temblorosa, le confesó su secreto: «Soy un cobarde. Tengo miedo de todo». La tortuga, con una sonrisa serena, le respondió: «La valentía no es la ausencia de miedo, sino la capacidad de actuar a pesar del miedo«.
La tortuga le contó a Leo la historia de un pequeño colibrí que salvó a un bosque de un incendio. El colibrí, a pesar de su pequeño tamaño, no se rindió y, con gran valentía, transportó gota a gota agua del río para apagar las llamas. La historia del colibrí inspiró a Leo. Se dio cuenta de que, incluso siendo pequeño o teniendo miedo, podía ser valiente.
Leo decidió seguir el consejo de la tortuga. Se enfrentó a sus miedos uno por uno. Comenzó por hablar con las ardillas y los conejos, y se dio cuenta de que no eran tan diferentes a él. Luego, se aventuró a explorar la sabana por su cuenta, y descubrió lugares increíbles que nunca antes había visto.
Con el tiempo, Leo se convirtió en un león valiente y respetado. Defendía a los animales más débiles y ayudaba a los que lo necesitaban. Los demás animales, al ver el cambio en Leo, lo admiraban por su valentía y lo llamaban «el león corazón valiente».
Moraleja:
Todos tenemos miedo a algo, pero la valentía no consiste en no tener miedo, sino en actuar a pesar del miedo. Cuando enfrentamos nuestros miedos y salimos de nuestra zona de confort, podemos descubrir la verdadera fuerza que reside en nuestro interior.