La carta bajo la almohada
Cuento Corto de amor

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En una casa junto al mar, Emma, una niña curiosa y soñadora, encontró una carta bajo su almohada. Lo que parecía un simple pedazo de papel la llevó a descubrir un misterio escondido entre las olas.

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Emma pasaba el verano en una pequeña casa junto a la playa. Con su cabello rubio casi rizado y sus ojos azules como el mar, adoraba explorar la orilla en busca de conchas, piedras y pequeños tesoros que las olas dejaban a su paso.

Una noche, después de un largo día jugando en la arena, se recostó en su cama, cansada pero feliz. Sin embargo, al apoyar la cabeza en la almohada, sintió algo extraño. Al levantarla, encontró una carta doblada cuidadosamente, que no estaba allí antes.

Curiosa, Emma abrió la carta. Estaba escrita con una caligrafía elegante y decía:
«Busca donde la luna toca el agua, allí encontrarás el tesoro de los sueños perdidos.»

Intrigada, Emma decidió investigar al amanecer. Al día siguiente, mientras caminaba por la playa, recordó las palabras de la carta. En el horizonte, la luz del sol hacía brillar las olas, y algo entre la espuma llamó su atención. Corrió hacia el agua y vio una pequeña botella flotando. Al recogerla, descubrió que dentro había otra carta.

El mensaje decía:
«Para encontrar lo que buscas, sigue la línea de caracolas.»

Emma, emocionada, miró alrededor y vio una hilera de caracolas que se extendía a lo largo de la orilla. Las siguió hasta una cueva que nunca había notado antes. Al entrar, encontró una caja de madera decorada con estrellas y conchas. Al abrirla, encontró un espejo pequeño y un mensaje grabado en su superficie:
«El mayor tesoro eres tú y los sueños que llevas en tu corazón.»

Emma salió de la cueva con el espejo en las manos, sintiendo una extraña calidez en el pecho. Desde ese día, cada vez que veía el reflejo del mar en sus ojos, recordaba que los verdaderos tesoros no siempre son cosas materiales, sino las aventuras y la magia que llevamos dentro.